Hace poco tuve una conversación muy interesante con una amiga, doctora y profesora de ética para profesionales de la salud, en la que me explicó cuáles eran los fundamentos de la ética. De pronto, hizo un comentario muy contundente. «Mira», me dijo, «hay actos, decisiones, comportamientos, que cuando los ves o te explican piensas, ¡hombre, esto no se hace!, Esto no se debe hacer!». Es decir, estas decisiones, actos y comportamientos que nos hacen exclamar «esto no se hace», aunque pueden ser perfectamente legales y morales, son resultado de un comportamiento que no es ético.
Ya hace unos meses que, escuchando o leyendo algunas de las medidas que nos proponen para salir de la actual crisis económica a veces exclamo espontáneamente: «Esto no se hace!».